
Un millonario gastó un dineral en pintar un exclusivo RUF CTR Yellowbird. No esperaba que se lo devolvieran haciendo el pino
Quien juega con fuego se puede quemar, y quien transporta coches valorados en millones de dólares también corre el riesgo de quemarse ya que el más mínimo descuido puede generar daños valorados en miles de dólares.
Esto es lo que le ocurrió a un apasionado propietario de un RUF CTR ‘Yellowbird’, uno de los superdeportivos de los 80 más raros derivados del clásico Porsche 911. Tras invertir más de 150.000 dólares en tareas de mantenimiento y un repintado total de su pintura, el valioso coche terminó accidentado al descargarlo del camión que lo transportaba ante la atónita mirada de su dueño.
Un icono de los 80: el RUF CTR ‘Yellowbird’
El RUF CTR ‘Yellowbird’ es una versión modificada del Porsche 911 Carrera 3.2 y desarrollado por la firma alemana RUF, especializada en convertir los deportivos de la firma alemana en auténticas bestias. En concreto, solo se construyeron 29 unidades de este RUF CTR ‘Yellowbird’, lo que lo convierte en uno de los coches más codiciados en subastas de clásicos, y un habitual de los videojuegos de coches.
Su exclusividad lo ha llevado a alcanzar cifras históricas: en marzo de 2024, una de estas unidades se vendió por 6,05 millones de dólares, según informó TopGear.
A pesar de estar basado en el chasis del Porsche 911, el RUF CTR era muy distinto en especificaciones. Su peso se redujo a 1.170 kg gracias al uso de aluminio en varios paneles de la carrocería y defensas de fibra de carbono. Montaba un motor bóxer de seis cilindros con doble turbocompresor KKK, intercooler doble y un sistema de inyección DME derivado del Porsche 962 de competición. Todo lo anterior le otorgaba 476 CV de potencia y un par máximo de 553 Nm, capaces de superar los 342 km/h en pruebas oficiales, superando al Ferrari F40 por entonces.
De «pájaro amarillo» a negro brillante
Sea como fuere, el RUF CTR ‘Yellowbird’ protagonista de esta historia es uno de estos 29 ejemplares únicos que originalmente salieron al mercado con una carrocería pintada en un llamativo color amarillo, tal y como indica su apellido ‘Yellowbird’.
Buscando un aspecto más elegante, el propietario residente en California envió su unidad a la sede de RUF en Alemania para que, además de hacerle ajustes mecánicos, se repintara el coche en negro brillante.
Para muchos coleccionistas, modificar el color original de un modelo tan icónico puede parecer arriesgado, pero en este caso, el cambio agregaba un toque de distinción aún mayor.
Como puedes imaginar, ni el traslado ni el proceso de restauración fue para nada barato. En total, el propietario desembolsó más de 150.000 dólares, según detalla Road & Track. Este tipo de operaciones de restauración son comunes entre coleccionistas de coches de alto valor, que no dudan en enviar sus vehículos incluso a otros continentes para asegurar que estén en manos de expertos acreditados por el fabricante.
Un descuido muy caro
La tragedia llegó justo cuando el propietario estaba a punto de recibir su RUF CTR de vuelta y con su nuevo color de carrocería. Al descargarlo del camión en la góndola de transporte, no se aseguraron correctamente los neumáticos del coche, lo que provocó que este se deslizara por la rampa sin control.
El deportivo cayó dolorosamente desde una altura aproximada de 2,4 metros, impactando contra el suelo sobre el parachoques trasero, mientras la parte delantera quedaba elevada en un ángulo de 45 grados sobre el camión.
Las imágenes de un coche de seis millones de dólares haciendo el pino sobre un camión de transporte no tardaron en hacerse virales en redes sociales, y cuentas como @johnclaywolfeshowlas compartieron en Instagram acompañadas de mensajes como «Adivina cuántos millones valía este pajarito».
En esas fotos se puede ver al operario del transporte dentro del coche en el momento del accidente, observando impotente cómo una pieza de colección recién restaurada sufría daños que aún no han sido evaluados del todo pero que, sin duda, supondrán un importante desembolso para el responsable.
Imagen | RM Sotherby’s (Stephan Bauer)
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Un millonario gastó un dineral en pintar un exclusivo RUF CTR Yellowbird. No esperaba que se lo devolvieran haciendo el pino
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Rubén Andrés
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